domingo, 31 de enero de 2016

Estilos de Aprendizaje


Si bien sabemos que todos somos diferentes, mas sin embargo en los colegios y/o escuelas; en el proceso de enseñanza - aprendizaje,  no toman esto en cuenta al momento de realizar la planificación docente.

Para determinar un estilo de aprendizaje se toma en cuenta los rasgos cognitivos, fisiológicos y afectivos, permitiéndonos descubrir como el alumno percibe, descodifica, estructura y analiza lo aprendido, a medida que se   interrelaciona en su ambiente de aprendizaje.


*Gallego y Alonzo (2008) sostienen que: “… el estilo de aprendizaje se conforma a base de dos series de elementos, por una parte el estilo cognitivo está muy unido a la fisiología y no varía a lo largo de los años y por otra las estrategias de aprendizaje que los individuos desarrolla para ajustar el material de aprendizaje a su estilo cognitivo. Las estrategias las podemos aprender y cambiar, por eso decimos que el estilo de aprendizaje es “relativamente estable”, estable por la base fisiológica, relativamente por las diferentes estrategias que podemos aprender y ejercitar”.

Pudiéramos decir que cada persona desarrolla su propio método de aprendizaje, pero su estilo de aprendizaje pudiera cambiar de acuerdo al ambiente en que este se desarrolle. El aprendizaje será más efectivo cuando se le enseñe el estilo correspondiente de cada alumno.

Se proponen cuatro estilos de aprendizaje:

-       El Activo: En este proceso los alumnos se implican en el proceso de adquisición de conocimiento. Son entusiastas y de mentes abiertas, siempre están implicados en alguna actividad, son de personalidad espontaneas, creativas, arriesgadas, descubridores, improvisados, innovadores, deseos de resolver problemas. Les cuesta aprender cuando tienen que asimilar datos, adoptar un papel pasivo y cuando tienen que realizar trabajos solos.

-   El Reflexivo: En este proceso los alumnos necesitan la intervención del pensamiento y de la elaboración activa de quienes aprenden. Son prudentes observan bien y consideran todas las alternativas posibles antes de realizar un movimiento, son de personalidad pacientes, ponderados, inquisidores, analítico, receptivo, lentos y detallistas. Les cuesta aprender cuando no le permiten planificar previamente, cuando se le apura a terminar una tarea y cuando se les insta a ser el centro de atención.

-    El Teórico: En este proceso los alumnos tienen un enfoque lógico y complejo de los problemas, observan e integran las experiencias dentro de un marco teórico de referencia. En su sistema de pensamiento son profundos, son de personalidad lógicas, objetivas, criticas, estructurados. Les cuesta aprender en situaciones subjetivas y ambiguas, en donde enfaticen las emociones y los sentimientos y claro está, cuando carecen de un fundamento teórico.

-       El Pragmático: En este proceso en los alumnos predomina la experimentación y la aplicación práctica de ideas. Descubren el aspecto positivo de las nuevas ideas y aprovechan la primera oportunidad para experimentarlas. Son de personalidad prácticas, directas, eficaz, experimentadores, realistas. Les cuesta aprender cuando lo que hacen no está relacionado con la realidad, en actividades que no tienen un fin bien definido y cuando lo que aprenden no se relaciona con sus necesidades inmediatas.


Y es por esto que los maestros y/o profesores no ven los resultados deseados en algunos de sus alumnos, porque cada uno se ellos tiene un estilo diferente de aprender. Dentro del aula de clase nos encontraremos con alumnos extrovertidos, introvertidos, sociales, reservados; por eso debemos adaptar el proceso de enseñanza–aprendizaje atendiendo a la individualidad de los estudiantes, usando como referencia los estilos de aprendizaje, siendo de suma importancia el uso de todas las estrategias posibles para abarcar cada uno de los estilos de aprendizaje.

*Del manual neurociencias y practicas pedagógicas efectivas. 


lunes, 18 de enero de 2016

Niños "Hiperactivos"

Me da risa cuando escucho a un padre decir que su hijo es “hiperactivo”, y más aún si se trata de un  maestro diciéndole a un padre “su hijo es hiperactivo, tiene que llevarlo a un psicólogo para que lo mediquen”.  Me pregunto en que se basan estos padres y maestros cuando hacen esta afirmación, ya que la hiperactividad no es solo que el niño sea extremadamente inquieto, hay muchos otros factores que tienen que darse para poder diagnosticar al niño como tal.
Como maestra siempre he estado clara que no estoy calificada para poder dar un diagnóstico de este tipo, a quien le corresponde hacerlo es al psicólogo, quien evaluara adecuadamente al niño. Mi tarea como maestra es observar al niño y si veo algunos de los síntomas de hiperactividad, pues lo correcto es hablar con el psicólogo escolar para que lo evalué, y dependiendo de los resultados, proceder hablar con los padres con base, ya que es un tema delicado y seria de mal gusto dar un diagnostico erróneo, solo por no  diferenciar entre un niño inquieto y uno hiperactivo.

Ahora bien como diferenciar a un niño inquieto de uno hiperactivo? Pues para que un niño sea diagnosticado hiperactivo tiene que presentar los siguientes síntomas, expuestos por la Dra. Biaris, médico psiquiatra, en su artículo Hiperactivo vs Inquieto.

*Actuar sin pensar
*Impulsividad
*Problemas de concentración
*Dificultad para completar tareas
*Dificultad para prestar atención
*Incapacidad de escuchar correctamente
*Incapacidad de ordenar tareas
*Imposibilidad para permanecer sentados
*Inquietud motriz excesiva y constante
*Discurso excesivo
*Rehuir realizar tareas que les exija concentración
*Realizar simultáneamente de diversas tareas sin completar ninguna
*Impaciencia
*Cambios en estado de ánimo
*Cambios en estado de actitudes
*Problemas de autoestima
*Dificultad para relacionarse con otros niños

Si su hijo u alumno presenta estos síntomas, pues debe referirlo al psicólogo para una pronta evaluación, quien a su vez lo referirá, a un psiquiatra infantil para que lo pueda medicar, ya que en la  mayoría de los casos lo necesitan.
   
Dejemos de jugar a ser psicólogos y de estar etiquetando a los  niños con “hiperactividad,” porque podría tratarse simplemente de un niño inquieto, que solo está buscando la atención de sus padres por alguna carencia emocional.

martes, 12 de enero de 2016

Los Trastornos en el Aprendizaje


Durante el proceso de enseñanza - aprendizaje pueden surgir diferentes trastornos, que interfieren en el proceso de enseñanza, dificultando el proceso de aprendizaje del alumno.


Si su hijo u alumno presenta todas las condiciones adecuadas, la madurez correspondiente y está acorde a su etapa y desarrollo, pero aun así presenta dificultades en el habla, la escritura, lectura, o para aprender las matemáticas, pues entonces  tiene un trastorno de aprendizaje.

Los trastornos de aprendizaje o dificultades del aprendizaje (DA) se podría definir como, la dificultad que presenta el niño para poder codificar, procesar y descodificar los razonamientos dados, así como la dificultad para  hablar, escribir, escuchar y el razonamiento lógico matemático.


Muchas de las dificultades se presentan en la primera infancia, otras surgirán durante el desarrollo del niño. Es importante saber que los trastornos del aprendizaje no tienen que ver con la inteligencia, puesto que muchos tienen un coeficiente normal o superior.

El logopeda, terapeuta ocupacional, pediatra neurólogo, son algunos de los especialistas que pueden diagnosticar y dar un tratamiento adecuado para corregir el problema de aprendizaje que presenta el niño.

Dentro de las dificultades o trastornos de aprendizaje tenemos:

*Dislexia: Dificultad para leer.
*Disgrafía: Dificultad para escribir.
*Discalculia: Dificultad para realizar cálculos matemáticos.
*Trastornos de Déficit de Atención (TDA): Dificultad para prestar atención por hiperactividad.
*Afasia: Dificultad de comunicarse mediante el habla, la escritura o la mímica, debida a lesiones cerebrales.
*Disfasia: Trastorno del lenguaje oral, debida a lesiones cerebrales.
*Dislalia: Dificultad de articular palabras, debido a malformaciones en los órganos comprometidos con el habla.
*Ecolalia: repetición de una palabra o frase.

lunes, 4 de enero de 2016

"Kaos" en el Aula

Hay una frase, que cierta o no, es muy bonita: "en Japón los únicos ciudadanos que no están obligados a inclinarse en reverencia frente al Emperador, son los EDUCADORES. La razón es que los japoneses sostienen que sin EDUCADORES no pueden haber EMPERADORES."

Ser educador es una hermosa y laboriosa profesión, admirada y honrada por muchos. 


Los maestros interactúan  con sus alumnos en un ambiente armonioso, lleno de paz y sin interrupciones. Donde todo fluye de acuerdo a lo planificado, donde todos los niños prestan atención y se comportan. Todo esto suena muy perfecto, pero dista mucho de la realidad que vive el maestro dentro del salón de clase.

Lo cierto es que, dentro del salón de clase; los temas no siempre se desarrollan de acuerdo a lo planificado ni en el horario programado, siempre hay un giro, ya sea a favor o en contra del mismo. Esto puede producirse porque las condiciones del ambiente dentro del aula no son las adecuadas para desarrollar otro tema. Puede que algunos de los niños no estén prestando atención, porque algunos estén corriendo dentro del aula, jugando encima de la mesa  o porque estén usando los materiales de forma inadecuada. En fin, son muchas las situaciones que se pueden presentar dentro del salón de clase, dificultando el proceso enseñanza-aprendizaje,  y es justo aquí donde los maestros suelen  entrar en caos; porque debe desarrollar el tema planificado, pero al mismo tiempo debe poner orden dentro de su salón de clase.

Lo primero es identificar al líder dentro del grupo, ya que siempre hay uno que motiva hacer la “conducta” inapropiada, en este caso. El líder es quien dirigirá a los demás, es quien cambiara de una acción a otra, haciendo que los demás lo sigan. Inmediatamente el líder es identificado, nuestra atención se centrará solo en él, porque cuando este se comporte de la manera adecuada, los demás inmediatamente lo harán.

En algunos casos la corrección será simplemente ignorar al niño, ya que aquí lo que busca es ser visto, que vean lo que está haciendo, ser el centro de atención. Por esto debemos hacer todo lo contrario a lo que ellos quieren, y esto es ignorarlos. Al ser ignorados se darán cuenta que su accionar no es llamativo y al no lograr su propósito, dejaran de hacerlo.

Estamos de acuerdo en que hay acciones que no pueden ser ignoradas y por eso dependiendo de la acción realizada por el niño se aplicara esta corrección.

Es tarea del maestro conocer a cada uno de sus alumnos y partiendo de esto, sabrá cómo manejarlo y recanalizar la acción negativa a una acción positiva, ya sea que el niño juegue con su material favorito, llevándolo al área de juego por unos minutos, colocándole su música favorita, leyéndole un cuento o simplemente nombrar a ese alumno como su ayudante para la actividad que van a realizar.

Como dije anteriormente, es tarea del maestro conocer a sus alumnos y por esto el maestro debe aprender a identificar cuando el alumno solo quiere llamar la atención o simplemente lo está manipulando para obtener lo que quiere.

Educar siempre será una hermosa labor, siempre y cuando se haga con entrega y amor.